Conservación de la Cantidad de Materia
Objetivo:
Se pretende conocer el pensamiento del niño para conducirlo hacia la flexibilidad y adaptación a cualquier situación, independientemente de los cambios que sufran las cosas. Dicha flexibilidad le permitirá anticipar los eventos futuros o retoceder a los pasados, dejando a un lado el razonamiento lógico a lo visualmente perceptible.
Material:
2 bolas de pasta de modelar o plastilina (diámetro de unos 4 cm.) de colores diferentes.
Procedimiento:
- Situación 1: Presentación.
“Vamos a trabajar con estas dos bolas de plastilina. Pero, primero necesitaremos tener la misma cantidad de plastiline roja y azul. Tú, ¿qué crees? ¿Tendremos la misma cantidad?”- SÍ: “Muy bien. Entonces tenemos lo mismo. Vamos a empezar.” Se procede con situación 2.
- NO: “¿Podríamos hacer algo para tener la misma cantidad? ¿Qué?” Una vez igualadas, sigue situación 2.
- Situación 2: Primera deformación.
El examinador transforma en salchicha una de las bolas (unos 12 cm). “Y ahora, ¿tendremos la misma cantidad de plastilina aquí (bola) que aquí (salchicha)? ¿Alguien tendrá más? ¿Cómo lo sabes?” Posibles respuestas:- Conservación: El niño afirma y explica que se mantiene la misma cantidad. Entonces, el exminador da un contraargumentación, a través de la cual le insiste en una sola dimensión. “Pero, mira. Aquí (salchicha) es muy larga. ¿No crees que hay más en la salchicha que en la bola?” O bien, el examinador puede contraargumentar, “Fíjate. El otro día yo hice este juego con un niño muy intelegente. Sabía muchas cosas y tenía solo cien en las clases. El me dijo que la salchicha tiene más porque es muy larga. Tú, ¿crees que el niño tenía razón o estaba equivocado? ¿Por qué?
- No Conservación: El niño considera que una de las plastilinas tiene más que la otra. Entonces el examinador conduce al niño hacia el retorno empírico, que consiste en recordarle las cantidades inicialmente iguales. Checa en situación 1. “¿Recuerdas cómo hicimos las bolas antes? ¿Recuerdas cómo era la salchicha antes de ser salchicha? Si yo vuelvo a hacer una bola con esta salchicha, ¿tendremos la misma cantidad? ¿Cómo sabes? Y si la dejo en salchicha, ¿tendremos lo mismo?”
- Situación 3: Segunda deformación.
El examinador inicia con 2 bolas de platilina igualadas por el niño. Posteriormente, procede a transformar una de las bolas en galleta (alrededor de 7 cm de diámetro) y se procede igual que en la primera deformación, tanto para conservación como para no conservación. - Situación 4: Tercera deformación.
El examinador inicia con las bolas de plastilina igualadas por el niño. Luego, fragmenta una de las bolas en trozos (alrededor de 8 a 10 trozos) y se procede como para las demás deformaciones.
Nota:
Las diferentes transformaciones son realizadas tanto por el examinador como por el propio niño. El niño puede hacer la galleta o pequeñas bolitas, etc.
Conductas:
- Nivel 1: No Conservación (hasta los 5 ó 6 años)
Se juzga en cada una de las deformaciones que una de las cantidades es mayor. Por ejemplo, “Hay más (en la salchicha) porque es más larga.” Frente a los argumentos del examinador que llama la atención del niño sobre la dimensión pasada por alto (por ejemplo, la delgadez de la salchicha), el niño mantiene su juicio, o bien juzga entonces que la otra cantidad es mayor. El recuerdo de las cantidades inicialmente iguales no modifica en modo alguno el juicio del niño. En este nivel, el problema del retorno empírico puede o no ser resuelto correctamente. - Nivel 2: Conductas Intermedias (transición)
Los juicios que oscilan entre la conservación y la no conservación aparecen de tres maneras principales:- Para una misma deformación el niño juzga alternativamente que las cantidades son iguales y diferentes. “Hay más en la salchicha. No hay más en la bola. Hay lo mismo para comer en las dos. Etc.”
- Los juicios de conservación y no conservación alternan en las diversas deformaciones. Por ejemplo, se juzga que la cantidad es igual en la galleta pero desigual en los trocitos.
- Es suscitada por los contraargumentos una alternative de juicios. Cuando el examinador recuerda la igualdad de las cantidades iniciales, aparece una respuesta de conservación, o bien el niño vuelve a la no conservación cuando el examinador insiste en la diferencia de las formas.
Las justificaciones dadas para un juicio de conservación son, en general, poco explícitas y, además, incompletas. En este nivel, el problema del retorno empírico es reuelto correctamente.
- Nivel 3: Conservación (a partir de los 7 años)
En cada una de las deformaciones, se juzga que las cantidades son iguales. El niño es capaz de dar una o varias de las explicaciones siguientes:- El llamado argumento “de identidad”: “Hay la misma cantidad para comer porque ni se ha quitado ni se ha puesto nada.”
- El llamado argumento “de reversabilidad”: “Hay siempre la misma cantidad porque si se rehace la bola, será parecido.”
- El llamado argumento “de compensación”: “Aquí (la galleta) es grande pero es más delgada (que la bola), entonces viene a ser lo mismo.”
El juicio de conservación es mantenido a pesar de las contra-argumentaciones del examinador.
Ejemplo Práctico 1:
- Adulto:
Quiero que observes muy bien lo que voy a poner aquí. (Escribe ‘libro’.) Aquí escribí libro. Ahora, fíjate que voy a escribir aquí. (Escribe ‘LIBRO’) Tú, ¿qué crees? ¿Dirá lo mismo aquí (libro) que aquí (LIBRO)?
Niño:
No, es diferente. Son diferentes letras. No dice lo mismo. Estas son más grandes.
Adulto:
Tú, ¿qué piensas? ¿Qué dice?
Niño:
Mmm, ¡Librote!
Ejemplo Práctico 2:
- Adulto:
Observa lo que voy a escribir. (Escribe ‘2 + 3 =’) ¿Qué escribí?
Niño:
Escribiste 2 + 3 = . Escribiste una suma.
Adulto:
¡Muy bien! Ahora, voy a poner otra cosa. (Escribe ‘3 + 2 =’) Tú, ¿crees que esta suma es igual o diferente que la otra?
Niño:
Es muy diferente. Mira aquí. Pones primero el 2, pero acá está el 3. Luego pones el 3 y acá el 2.
Adulto:
Y si lo sumamos, ¿tendremos la misma cantidad o diferente? ¿Por qué?
Niño:
Claro que diferentes. Son sumas diferentes.
Adulto:
¿Podremos hacer algo para estar seguros que son diferentes?
Niño:
Sumarlas.
Adulto:
Bueno. Vamos a sumarlas. (Pueden usarse objetos.)
A través de los ejemplos anteriores es posible observar como el niño hace su juicio basándose en lo que percibe con su vista, en lo aparente, igual como sucedió con la plastilina.